De L.V.:
Cuatro conductores de autobús de TMB inician una huelga de hambre
Empresa y sindicatos vuelven a reunirse hoy para negociar una solución | La Guardia Urbana impide que los trabajadores se instalen con sillas delante del Ayuntamiento
Barcelona. (EFE).- Cuatro conductores de autobuses de TMB han iniciado una huelga de hambre para presionar a la dirección de la empresa pública ante la negativa de ésta a aceptar su reivindicación de dos días de descanso semanales.
La intención de los huelguistas era instalarse frente al ayuntamiento, lo que un amplio dispositivo de la Guardia Urbana ha impedido alegando que la ordenanza cívica no lo permite.
Uno de los huelguistas y delegado del comité de empresa, Josep Garganté, ha explicado que con la huelga de hambre "queremos demostrar que estamos dispuestos a todo para llegar a un acuerdo antes de que se vuelvan a reiniciar los paros", convocados en defensa de que los conductores tengan dos días de descanso semanal.
Los huelguistas han llegado esta mañana a Plaza de Sant Jaume y se han intentado instalar junto al belén que hay en la plaza, de cara al Ayuntamiento de Barcelona, ya que TMB es una empresa pública que depende del consistorio.
Los trabajadores en huelga de hambre, que han llegado pacíficamente y en un grupo reducido, ha desplegado dos pancartas en el suelo, una mesa plegable e iban a poner unas sillas cuando se han personado numerosos efectivos de la Guardia Urbana.
Delante de las cámaras de televisión y la prensa congregada, un oficial de la Guardia Urbana ha obligado a los huelguistas a retirar la mesa -de reducidas dimensiones- y les ha explicado que si querían hacer huelga de hambre deberían hacerlo de pie.
Los conductores de autobús han solicitado la orden por escrito, a lo que el agente se ha negado y ha argumentado que la nueva ordenanza cívica municipal impedía a los huelguistas tener sillas en la vía pública, pese a que éstos han asegurado que no iban a vender nada.
"Es un trato inhumano por parte de un Ayuntamiento que se dice de izquierdas y progresista. No sólo se niegan a negociar que tengamos dos días de descanso semanal, sino que ahora pretenden que hagamos huelga de hambre de pie", ha lamentado Garganté.
Garganté se ha mostrado esperanzado de que la huelga de hambre "sirva para llegar a un acuerdo en las conversaciones que estamos manteniendo con TMB, porque es lo mejor para los trabajadores y para los usuarios".
Los huelguistas tienen previsto permanecer hasta las 22.00 horas en la Plaza de Sant Jaume y, si bien esta noche prevén ir a dormir a sus casas, las próximas jornadas quieren acondicionar con colchones un local cercano para pasar las noches.
Esta protesta de los trabajadores de los autobuses, que se produce a pocos días de la convocatoria de nuevas jornadas de huelga, empieza el mismo día en que dirección de la empresa y sindicatos volverán a reunirse para buscar una salida al conflicto.
Fuentes de CGT, sindicato convocante de la huelga de autobuses junto con Actub, han asegurado que acuden "sin grandes esperanzas" a esta reunión.
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, llamó ayer de nuevo a los sindicatos organizadores de la huelga a desconvocar los paros de los próximos días y les advirtió que mantenerlos no "influirá" en el proceso de negociación. Hereu, al que los sindicatos pidieron que actuara de mediador en el conflicto con TMB, insistió en que se deberían suspender las huelgas previstas para enero con independencia del resultado del contacto de hoy ya que "éste no es el momento" para llevar a cabo movilizaciones como las planteadas.
Los sindicatos CGT y Actub convocaron siete jornadas de huelga -entre los próximos 21 y 24 de diciembre y del 2 al 4 de enero-, para pedir un nuevo modelo de fiestas que incluye dos días de descanso a la semana.