En esta línea se funden conceptos como, historia, encanto, servicio, turismo, magia..., que un medio de transporte como un tranvía histórico puede dar a la ciudad.
La baixa, Alfama, El castillo de San Jorge, la Catedral....en fin toda un proeza técnica que presta servicio a los propios ciudadanos. Viajar a bordo de un Eletrico 28 es una experiencia del XIX en pleno Siglo XXI, algo así como un tranvía blau pero con unos cuantos kilómetros más y con una frecuencia de minutos. Saludos al Foro
